Pero la ingeniosa forma de armar un reparto de “todos estrellas” no era lo único interesante de aquel proyecto. Como su película anterior (Timecode), Figgis rodaba en vídeo digital y su equipo estaba compuesto por una sola persona: el director.
Él mismo era todo su crew.
De modo pues, que la comedia de caníbales –titulada Hotel– resultó ser la labor de un hombre orquesta que tocaba un instrumento que él mismo había inventado (en colaboración con Ben Wilson).
El invento parecía el volante arrancado de un automóvil (aunque Wilson también diseñó un prototipo que parece el timón de una bicleta y otro similar a un salvavidas inflable) y le permitía a Figgis, no sólo manejar la cámara con más estabilidad, sino también el sonido y la iluminación.
Tiempo después, el fabricante de trípodes Manfrotto contactó a Figgis para comercializar su invento.
Al respecto, Figgis comentaría:
Necesitaba diseñar una pieza para la nueva generación de cámaras DV. Algo que aguantara la cámara y que, al mismo tiempo, eliminara la inestabilidad característica de las cámara tan pequeñas”.
Al nuevo estabilizador, producto de esta colaboración, le han bautizado como The Fig Rig y sigue pareciendo el volante de un automóvil. Un volante con el que se puede filmar.
El Fig Rig permite montar una cámara, micrófonos y luces y manejarlos al mismo tiempo. Pequeños ganchos mantienen en su lugar los cables de los diversos aparatos. Manfrotto también ha concebido varios controles remotos para operar las funciones de la cámara a distancia.
Aunque con el Fig Rig no se obtienen los mismos resultados que con un steadycam, su fácil manejo, su simpleza de diseño y las posibilidades que ofrece para operar varios instrumentos al mismo tiempo, lo convierten en una excelente alternativa.
El precio alrededor de los 300 dólares americanos, aunque depende de los accesorios que se le añadan.
Mike Figgis muestra el Fig Rig original en Berlín
Vídeo | Pruebas de movimiento de cámara con el Fig Rig
Vídeo | El Fig Rig original en acción