En diciembre pasado, Kevin Kelly publicó (o, mejor dicho, puso en línea) la segunda edición de su ebook True Films. Esta vez no son 150, sino 200 los grandes documentales que hay que ver antes de morir.
Kelly es considerado un gurú de la cultura digital y razones no faltan: fundador de la revista Wired, uno de los editores de Whole Earth Catalog, escritor y fotógrafo. Tampoco es ajeno al cine. Su pensamiento forma parte del imaginario tecno filosófico de la serie Matrix. Su libro Out of Control: The New Biology of Machines, Social Systems, and the Economic World, fue lectura obligatoria para los actores de la trilogía de los hermanos Wachowski.
Quizás “documentales” no sea la mejor traducción para lo que Kelly llama true films: filmes cuya materia prima es la realidad directa y cuya definición engloba documentales, filmes didácticos, tutoriales tipo “Cómo hacerlo” y, según sus palabras, lo que los británicos llaman factuals —films de no ficción. De modo que su lista es lo suficientemente flexible y abierta como para incluir películas que no pueden ser definidas como documentales en el sentido tradicional.
En el ebook, no están todos los que son por razones prácticas. Kelly únicamente incluye aquellos disponibles en VHS y DVD, a precios accesibles. No están listados los documentales que sólo se pueden ver en salas de cine o cuyas copias se venden a precios exorbitantes o que, obvio, no están disponibles. Además de los 200 documentales que hay que ver antes de morir, Kelly menciona un puñado que, a su juicio, son simplemente buenos. Dato curioso: el autor estima que se han realizado unos 40 mil documentales. No sé de dónde habrá sacado ese dato, pero pienso preguntárselo en su blog.
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