En 1965, Jean-Luc Godard estrenó Pierrot le Fou, uno de sus filmes más emblemáticos.
La película, basada en la novela Obssesion de Lionel White, está protagonizado por Anna Karina y Jean-Paul Belmondo y con ritmo frenético contaba la historia de la huida de un par de perdedores. Ferdinand Griffon, “Pierrot” (Belmondo) es un ejecutivo de televisión sin empleo y con un matrimonio desdichado que, después de una aburrida fiesta, decide dejar a su mujer y sus hijos y huir con su niñera, Marianne Renoir (Anna Karina). No obstante, pronto descubrirá que Marianne está siendo acechada por mafiosos argelinos y que ambos deben huir.
Al comienzo del filme, en la fiesta aburrida, Ferdinand se topa con un americano de lentes oscuros y apariencia solitaria. Ferdinand le pregunta el nombre y a qué se dedica. A lo que el americano responde:
Soy un director de cine estadounidense. Mi nombre es Sam Fuller y estoy dirigiendo una película aquí en París.
Ferdinand estonces ve la oportunidad de preguntar algo que siempre había querido averiguar: “Siempre he querido saber qué es, exactamente, el cine…”
Fuller, quien además de muchas cosas, combatió en la II Guerra Mundial, le explica:
El cine es como un campo de batalla. Amor, odio, acción, violencia, muerte. En una palabra: emoción.
Vía | Movie City Indie