¿Qué puedo decir sobre Wall-E que no se haya dicho ya?
Bueno, que todo lo que se ha dicho, me parece cierto y justo: que Wall-E es una de las películas de ciencia ficción más importantes de ¿las últimas dos décadas?
Que allí donde el cine actual es todo verborrea, incontables diálogos expositivos, recitaciones pretendidamente poéticas y mareantes voces en off cuyo único fin es el remendar estructuras narrativas chapuceras, Andrew Stanton y la gente de Pixar se la han jugado con una película en la que la palabra brilla por su ausencia. Y vaya que brilla: durante casi la primera hora de Wall-E apenas se dice nada. Y ni falta que hace…
Que Wall-E es una de los personajes más adorables del cine infantil. Que si el diseño de EVE, suave, curvilíneo y conceptual, parece propio del genio de Jonathan Ive es porque, precisamente, el diseñador del Ipod y la iMac sirvió de consultor. Que si la voz de Wall-E se parece a la de R2-D2 es porque, precisamente, comparten un mismo creador: Ben Burtt.
Todo eso se ha dicho. y más.
Y cómo todo se ha dicho, yo sólo puedo agregar que me gustó porque parece escrita por la pluma, melancólica y cálida, de Ray Bradbury, mi autor favorito de ciencia ficción. Porque Wall-E, el personaje, es a veces Pinocho, a veces Robinson Crusoe, a ratos David, aquel trágico niño robot de A.I. Porque la película le rinde tributo a las grandes cintas de ciencia ficción de finales de los 60 y los 70, sin ser pretenciosa y sin plagiar nada, –excepto HAL9000, pero ¿cómo no plagiar a uno de los mejores personajes de la historia de la ciencia ficción, esa computadora neurótica y autoritaria de un sólo ojo rojo que todo lo ve?
Me gustó esta película porque, en su éxito al humanizar lo inanimado y dotar de emociones a un par de trastos, recupera el verdadero espíritu del viejo Disney.
Me gustó Wall-E toca grandes, importantes temas, sin un sólo discurso. Porque advierte sobre los peligros de la dependencia tecnológica, del monopolio económico, el consumismo, la frivolidad, la soledad, el materialismo, la soledad y la destrucción rampante de la naturaleza, sin un sólo regaño.
Ni uno.
Ya está anotada en mi lista de películas favoritas.
Wall-E | Trailer
Wall-E Trailer 1080p from Edouard Lorenceau on Vimeo.
