Este año, Lars von Trier lo hizo de nuevo. Prácticamente, desde 1998, creo, lo ha venido haciendo. Cada una de sus comparecencias en Cannes deja huella. Desde que lanzó panfletos del manifiesto del Dogma 95 desde los balcones del Palais, hasta esta mañana, cuando aseguró comprender a Hitler. Eso, sin contar la boutade del año antepasado, cuando aseguró ser el director más importante del mundo.
Todo ocurrió durante la conferencia de prensa, después de la exitosa presentación de Melancholia, su cinta más reciente. Interrogado sobre su relación con el judaísmo, tal parece que el danés de dejó arrastrar por la jovialidad que se había respirado durante toda la conferencia de prensa y soltó, así, sin más:
Lo único que puedo decir es que durante mucho tiempo pensé que era judío y estaba contento. Luego comprendí que no lo era. Quería ser judío pero en realidad me di cuenta de que era un nazi porque mi familia era alemana, lo cual también me agradaba. Yo entiendo a Hitler aunque comprendo que hizo cosas equivocadas, por supuesto. Solo estoy diciendo que entiendo al hombre, no es lo que llamaríamos un buen tipo pero simpatizo un poco con él. No estoy a favor de la Segunda Guerra Mundial ni estoy en contra de los judíos, salvo quizás los israelíes, algunas veces son un problema…
Al darse cuenta de las honduras en que se había metido, sobre todo, en un país como Francia, donde este tipo de comentario están penados por la ley, trató de arreglarlo.
Ay, Dios mío, ahora cómo arreglo esto. Okey, soy un nazi. Esta película está hecha a gran escala. Sí, eso es lo que hacemos los nazis, cosas a gran escala.
Comentarios de este tipo, han hundido a más de uno. ¿Mel Gibson? ¿John Galliano? ¿Nacho Vigalondo? La disculpa, a través de un comunicado de prensa, no se hizo esperar:
Si he herido a alguien con las palabras de esta mañana, me disculpo sinceramente. No soy antisemita ni tengo prejuicios raciales de ninguna clase ni soy un nazi.
El festival también se apresuró a sacudirse del asunto:
El Festival de Cannes, profundamente preocupado por las declaraciones de Lars von Trier en su conferencia de prensa esta mañana en Cannes, le ha pedido una explicación de sus comentarios. El director cuenta que se dejó llevar por la provocación. Y pide disculpas. La dirección del Festival toma nota y transmite las disculpas de Lars Von Trier. Reafirma que no admitirá jamás que el certamen pueda ser el escenario de declaraciones semejantes sobre esos asuntos.
El impasse, no obstante, no parece haber hecho otra cosa que cimentar su fama de provocador y polémico. Tampoco ha podido eclipsar el entusiasta recibimiento de Melancholia, un filme de ciencia ficción con profundas implicaciones existenciales que la crítica no ha dudado en aplaudir. A pesar de los comentarios negativos vertidos por su propio realizador en la rueda de prensa.
Fue un gran placer hacer la película. Toda la oscuridad que pusimos en ella. Nos dejamos llevar. Un poco sobre-romántico, pero agradable de hacer. Cuando vi las imágenes fijas, como que la rechacé un poco. De modo, que no estoy muy seguro. Tal vez sea una mierda en realidad. Por supuesto espero que no, pero existe la posibilidad de que no sea digna de ver.
Nada que hacer, puro von Trier.
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