Este maremágnum imaginativo que inferimos al conocer el potencial de Processing resulta, sin duda, deslumbrante. Pero ¿es realmente viable su uso para productos de consumo masivo? Sí, entre las cosas hechas con Processing hay maravillas, además.
La casa de Naipes de Radiohead
Entre las cosas hechas con Processing destaca desde luego el video de Radiohead.
En 2008 Radiohead presentó tanto en internet como en los medios audiovisuales tradicionales su videoclip House of Cards. Es gracias a intentos como este que se puede llegar a dar, realmente, un paso hacia adelante en las corrientes culturales predominantes que hacen un llamado honesto a lo novedoso. Cabe destacar que 2008 fue el año del lanzamiento de la versión 1.0 del programa.
Mientras por televisión podía verse el impresionante video bajo una experiencia tradicional emisor-receptor, en internet se podía “navegar” el rostro de Thom Yorke, en una versión alternativa-interactiva de la data capturada para “House of Cards”. Pilotar entre millones de puntos y hacer zoom son algunas de las posibilidades.
Precisamente esta versión puede verse en el website oficial de Aaron Koblin, el director de tecnología del video. Junto a Koblin trabajó Aaron Meyers, para programar la interacción elaborando el código.
En el video toda la información que logra finalmente ser vista es en realidad una serie de puntos en tres dimensiones, generados por un sistema de medición de profundidad con láseres.
El resultado es un compilado gigante de números. El código de “House of Cards” puede descargarse aquí.
Sobre este vínculo que permite la descarga del código fuente, Leonardo Solaas, artista argentino y experto en la materia (a quien podrán conocer en el capítulo final de esta serie de posts sobre el tema), nos aclara: “los primeros dos vínculos contienen información, que en sí es ‘agnóstica’ y se puede leer y procesar con el lenguaje o plataforma que uno quiera”.
Luego, el tercer vínculo que vemos en la página posee “los scripts de Processing, que se utilizaron para leer la data y generar con ella el resultado visual”, el que concretamente se ve en el video “House of Cards”.
En ejemplos como este es donde puede verse la intersección entre arte digital y matemáticas, ambas desembocando en un producto audiovisual, posiblemente, sin precedentes. La convergencia de esto con el mundo “pop” es clara, siendo a la vez catapulta evidente para la popularización de herramientas como Processing.
Al final del día, la fama es titiritera de ciertas tendencias y conductas. Posiblemente, haya que agradecer que exista este vanguardista video de Radiohead, incluso por encima de los otros fabulosos audiovisuales que nos han presentado a través de toda su trayectoria artística. “House of Cards” de hecho, estuvo nominado al Grammy en el rubro Mejor Video Corto, al Mejor Video de Rock en los VMA de Reino Unido y en los premios que otorga el Museo Británico del Diseño.
Cosas hechas con Processing: efectos visuales en Hollywood
Pero hay más cosas hechas con Processing. Por ejemplo, efectos especiales.
Más recientemente películas como “Tron: Legacy” se han conectado a las posibilidades exclusivas de la conspicua herramienta.
En el caso preciso de “Tron: Legacy” el trabajo de algunas escenas fue hecho por un miembro de la comunidad de Processing.
No obstante, la herramienta que fue utilizada es otro lenguaje relacionado, igualmente redentor de la creatividad, denominado openFrameworks.
La película acaparó las nominaciones en los premios que otorga la Asociación de Efectos Visuales de EE.UU. Curiosamente obtuvo solo la pre-nominación al Oscar de la Academia en el rubro de Efectos Especiales (fue nominada a Edición de Sonido).
Respuestas más concretas sobre el tema, pudieran ser respondidas por un venezolano ligado a la creación de ciertos momentos formidables en el film: Álvaro Segura, quien fue protagonista de un antiguo post en Blogacine. (artículo basado a su vez en una breve reseña hecha en la Revistas Estampas, en diciembre de 2010), en el cual se relataba su participación en “Tron: Legacy” (específicamente en los desarrollos visuales que hizo para el logotipo).
La comunicación con Segura fue infructuosa para nutrir este episodio del presente post acerca de Processing. Sin duda, hubiese sido elocuente exponernos su experiencia y hablarnos de las herramientas digitales que utilizó -o que vio utilizar- en este épico remake digital del cine contemporáneo.
¿Existen otros títulos recientes de Hollywood donde Processing -o aplicaciones de basamento similar- haya participado para generar de excéntricos grafismos? Es una pregunta que no fácilmente es contestada en Internet. No hay mucha información sobre nexos muy precisos entre la herramienta y éxitos de taquilla hollywoodenses que hayan justificado su utilización.
El punto es: Processing aun no da el gran salto al mainstream; pues sigue en un proceso evolutivo, experimental. Si bien las posibilidades son tan infinitas como la matemática misma, no se trata tampoco de hacer completamente admisible una herramienta sumamente especial para “generar arte”, pero si evidentemente plausible y de resultados verosímiles.
Artistas y diseñadores que trabajan con Processing hacen trabajos por encargo cobrando precios módicos o razonables (si, es obvio que EE.UU. es primariamente un nido de clientes), pues a pesar que son casi un grupo selecto, la demanda del producto es muy puntual, limitada, remota y varía según la complejidad de cada caso.
Además, hay que considerar si lo que se solicita ha sido ya intentado, y si el autor de este antecedente decide ofrecer su creación, estimulado quizás por la licencia abierta que propone el mismo software.
La reputación de Processing es notoria, más no aun su trascendencia en los principales mercados de producción y comercialización. En lo particular me atrevo a decir que no es peyorativo afirmar que Processing aun permanece en el underground, pero ileso, con orgullo y sin coquetear muy de prisa con las corrientes principales.
Más cosas hecha con Processing: Solaas interactivo
Leonardo Solaas un joven argentino, radicado en Buenos Aires (y quien gustosamente atendió mi llamado para colaborar en el amplio desarrollo de esta nota) conoce de la materia a plenitud, y puntualiza:
Processing es sólo una de un conjunto de herramientas posibles. Cuál sea la herramienta más apropiada depende de qué sea lo que uno se propone hacer.
Leonardo Solaas es artista, diseñador y programador. Ha creado numerosos proyectos interactivos con Processing. Dos de los más populares son Dreamlines y Wish Café.
Estos desarrollos son explicados con mayor claridad por el mismo Solaas, en una video-entrevista realizada en 2010 por Victoria Messi para “El Pez Eléctrico”, una publicación argentina sobre arte, cultura y tecnología.
El artículo titulado “Leonardo Solaas: Generatividad y sistemas complejos” pueden leerlo completo aquí.
El video a continuación:
Viendo material como el creado por Solaas, uno puede darse cuenta que las posibilidades, como a muchos, produce toda una vorágine de emociones y estímulos. Processing, efectivamente, provoca.
Leonardo Solaas además visualiza el conjunto de generosidades con unos cuantos valores agregados:
Los motivos que podrían llevar a elegir Processing son varios: es gratuito y de fuente abierta. Tiene una amplia comunidad de gente que lo está usando y por ende muchos ejemplos y ayuda disponible.
Por si fuese poco la herramienta “está basada en una plataforma ampliamente distribuida como lo es Java; y es relativamente sencilla y fácil de aprender”, remata Solaas, como para limpiar el panorama de atisbos.
Dreamlines, el arte digital y lo onírico, cosas hechas con Processing
En el mundo del arte también hay cosas hechas con processing. Sin pretender disponer de todas las apreciaciones positivas que se han reiterado en el artículo, en lo que pudiera percibirse como una suerte de folleto promocional excesivamente entusiasta o dogmático acerca del software; lo cierto es que las conjeturas no tienen cabida ni siquiera en lo referido a la docilidad de Processing, mucho menos en la benevolencia como herramienta de creación.
Si están en sintonía conmigo, pues podemos vislumbrar que estas cualidades son tanto incitantes como fastuosas.
Precisamente, de eso se trata Processing, una posible rendija por la cual podemos ser voyeurs del futuro. Por ende, debería ser un estímulo vasto para creativos, diseñadores, cineastas y artistas en general. ¿Tienes cosas hechas con Processing? ¿Qué esperas para comenzar?