Ya se acerca el estreno de una de las películas nacionales que más deseo ver; El Regreso, la ópera prima de la zuliana Patricia Ortega. Y si es una d elas películas que espero con más impaciencia es sencillamente, porque creo que puede hacerle justicia a ese ámbito mágico y feroz que es La Guajira.
En el cine venezolano ha habido algunos intentos de explorar a través de la ficción, el árido paisaje de la península y sus moradores. Pero ambos intentos han sido fallidos, acaso porque prevalece el prejuicio en la mirada foránea, centralista y eurocentrista, como en el caso de la coproducción hispano venezolana La Niña de Maracaibo, de Miguel Curiel. Aunque, por otro lado, también recuerdo un viejo y estupendo documental sobre La Guajira dirigido por John Petrizzelli y rodado en Súper 8, allá en la década de los 80.
Tengo la sensación de que El Regreso por fin contará la historia que La Guajira y los wayuu merecen.