Desde la aparición del Fig Rig, habíamos esperado que la gente de Manfrotto sacara al mercado un producto que fuese lo suficientemente ligero para ser transportado en un bolso de mano o morral, pero que al mismo tiempo proporcionara la estabilidad y la fluidez de movimientos de un trípode.
El Manfrotto 560B se parece bastante a lo que esperábamos.
Se trata de un monopie bastante particular, que hemos estado usando desde hace cosa de una semana, gracias a la gentileza de David&Joseph, distribuidores de la marca en Venezuela.
No se trata de un monopie cualquiera. El Manfrotto 560B posee una base con tres patas plegables, que le permiten afirmarse con mayor agarre en el suelo. Esta base se une al cuerpo del monopie por medio de una articulación de esfera o pivote, lo que asegura que la base siempre esté en contacto con el suelo, aunque sea irregular la superficie. Al mismo tiempo, este pivote dota al aparato de movimientos oscilatorios.
Pero acaso la característica más interesante del Manfrotto 560B sea su cartucho fluido, ubicado justo encima del pivote.