¿Han visto The Wire? ¿La serie?
Desde Persona, de Bergman, sabemos que no es el mismo cuento el que se cuenta que el que se escucha.
En la obra maestra del realizador sueco, Liv Ullman hace un relato y la cámara permanece sobre su rostro. Luego, el mismo relato se repite sobre el rostro de Bibi Anderson, mientras escucha. Pero ya no es el mismo. Algo ha cambiado.
—Atención: puede que me equivoque, que no sea Ullman quien narre y Anderson quien escucha. Disculpen: hace tiempo que no veo la película. Es más, puede que hasta me esté confundiendo de película. Pero estoy seguro de que lo vi en una de Bergman.
He recordado aquellas dos memorables secuencias viendo un capítulo de la primera temporada de The Wire. Estoy revisando las cinco temporadas de la serie pues una de las historias en las que estoy enfrascado —además de 3 Bellezas, la comedia de humor negro sobre el mundo de la belleza venezolana— por estos días es una especie de western urbano, ambientado en un barrio de Caracas.